Entrenando con mis deportistas

Van pasando los días, y de momento no me puedo quejar: 10 días seguidos de entrenamiento!! Mucho esfuerzo, la verdad, porque lo que antes era más o menos fácil, ahora es un sacrificio, y casi cualquier esfuerzo supone un reto. Pero contento de ir cumpliendo con el plan de adaptación diseñado!

Ayer fue un día especial. Llevo el entrenamiento de Rubén Ordóñez, que prepara las pruebas del "grupo de rescate de alta montaña de la Guarcia Civil". No son pruebas complicadas a nivel individual. Sin embargo, son tantas y tan variadas, que el deportista debe alcanzar niveles exigentes en muchas disciplinas y con múltiples factores de rendimiento. Eso compromete mucho la planificación y orientación del trabajo. De momento, excepto por una pequeña molestia que podría estar cerca de una periostitis, el entrenamiento de Rubén va fenomenal. Nos quedaba por testear una de las pruebas de carrera a pie, el 8000m.

Sobre el terreno donde se realizará la prueba, e intentando reproducir el recorrido exacto, nos lanzamos Rubén y yo, acompañados de dos buenos amigos más, Michel Galay (triatleta de LD y coordinador de la sección de trialtón de Mayencos) y Antonio del Castillo (también opositor a las mismas pruebas!!) El objetivo inicial era intentar estar en torno a los 32´, que evidentemente para un atleta es un ritmo muy cómodo, pero para un deportista que tiene que preparar pruebas de velocidad, de fondo, de fuerza, de escalada, de potencia, de salto... no es tan sencillo.

La táctica era clara: desde el "árbol de la salud" de Jaca hasta el cementerio, el ritmo debería ser ligeramente más rápido de la media deseada, y a partir de ahí, de vuelta, y con los suaves repechos de regreso, a sobrevivir y perder el menor tiempo posible. Hasta la mitad del recorrido todo fue en orden. Un sorprendente Michel, que el día de antes había hecho 140kms de ciclismo, aguantaba a cola de pelotón, mientras que Antonio sufría para soportar el ritmo estable planteado. Poco después, a falta de 3kms para el final, Michel y Antonio cedieron un poquito, dejando que se abriera un hueco entre ellos y nosotros. Rubén resoplaba, seguramente por la falta de eficacia que tiene en la carrera a pie, y la cantidad de energía que pierde en su técnica de carrera. El final, un poco agónico para él, ya que empezó a tener algún problema gástrico, nos colocó en la línea de meta en 31´55´´, clavando el tiempo!! Michel llegó a un minuto, mientras que Antonio entraba en el tiempo de la oposición, por debajo de los 35´ (Ánimo, Antonio!! este es tu año!!!)

Nuestros GPS´s dieron 8,0kms y 8,08kms respectivamente. Con lo cual, en ese margen de error que siempre cabe esperar en un medidor GPS, el tiempo estuvo con seguridad a un ritmo inferior a 4´/km, lo cual para Rubén es todo un éxito.

En cuanto a mí, fui muy preocupado por intentar echar una mano a Rubén y llevarle al ritmo que habíamos planeado. No fue tan fácil como debería haber sido, porque hace unos años correr esta prueba en 32´ era un auténtico paseo (mi mejor marca sobre este mismo recorrido debe estar en torno a 26´45´´ , y ahora supone un esfuerzo más que considerable. Pero contento por ir poco a poco adaptándome al entrenamiento, aunque los ritmos estén muy lejos de ser mínimamente competitivos. Queda mucho tiempo...!!!

Seguiré contando la evolución del entrenamiento! De momento, a seguir machacando!!!